todo sobre recreacion
  chistes de canibales
 
una vez un hombre caminando por la selva abre un matorral de ramas, y detrás de éste había un montón de caníbales, el hombre dice:
¡Ya la quede!
Cuando de repente se abre el cielo y se oye una voz:
¡No, todavía no, lo que usted tiene que hacer es correr, golpear al jefe, quitarle la lanza y matar a su hijo!
Y se cierra el cielo, el hombre rápidamente corre, golpea al jefe, le quita la lanza, y mata a su hijo.
Se abre el cielo de nuevo y se oye una voz:
¡Ahora sí, ya la quedaste!
 
 
Dos exploradores que se encontraban en una supuesta isla desierta, y caminando se encuentran con un letrero que dice: "PELIGRO: CANIBALES VEGETARIANOS", confundidos los exploradores deciden continuar, en eso se encuentran con un hombre que todo ensangrentado les dice:
¡Corran, corran!
A lo que los exploradores preguntan:
¿Por qué si son caníbales vegetarianos?
Y el hombre responde:
¡Sí, se comen la palma de las manos y la planta de los pies!
 
 
Esta era una vez una familia de caníbales que estaban cenando y sale el niño y le dice a la madre:
¡Mamá, no quiero a mi hermana!
Y la madre le contesta:
No hay problema hijo mío, sácala a un lado y comete el arroz.
 
 
Tres misioneros son capturados por una tribu de caníbales. El jefe caníbal les dice:
Ustedes tener que pedir algo que no poder cumplir y yo dejar vivir, sino comérmelos y utilizar su piel para forrar canoas. A ver tú.
El primero le pide un avión. El gran jefe dice:
A ver, traigan el avión.
Y miles de caníbales empujaban el avión; y se lo comieron y con su piel forraron canoas.
A ver tú, le dice al segundo.
Tráeme un tanque.
También se lo trajeron y se lo comieron y con su piel forraron canoas. Entonces, le toca al tercero.
A mí tráeme un tenedor, pidió el tercero. Más fácil que los anteriores dijo el jefe, traigan un tenedor.
El misionero lo mira y voltea el tenedor contra su cuerpo y comienza clavarse el tenedor al mismo tiempo que gritaba:
¡Mierda van a hacer canoas!
 
 
 
Dos amigos se encuentran y uno le pregunta al otro:
¿Qué tal te fue en tu safari?
El amigo le contesta:
Pues chico, lo más que cacé fueron aminoguanas.
¿Cómo?, serán iguanas.
No chico, aminoguanas.
¿Y qué clase de animal es ese?
Uno negro, peludo, pequeño, que cuando yo le apuntaba con el rifle, levantaba las manos y decía:
¡A mí no guana! ¡A mí no guana!
 
 
 
 
 
   
 
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis